Conoce a los futuros propietarios: Brandon y Chantay

Brandon y Chantay son nativos de Denver y saben que sus dos hijos están aprendiendo lecciones importantes mientras sus padres construyen su futuro hogar en la zona de Swansea.

"Están aprendiendo a trabajar duro por algo que quieres conseguir", dice Chantay. "Nos ven ir a trabajar en la casa y se quedan con la abuela, pero preguntan en qué estamos trabajando. Saben que estamos construyendo nuestra primera casa de verdad".

Su búsqueda de la vivienda propia empezó hace tres años, cuando Brandon, Chantay, su hijo de 9 años y su hija de 7 vivían en un apartamento de una habitación. Sabían que tenían que mudarse, pero no podían permitirse una casa.

"En el piso había ratones y hormigas", cuenta Chantay. "Cuando encendimos un ventilador, se incendió. El casero quería subirnos el alquiler, pero no arreglaba nada".

Hace poco, la familia se mudó con la madre de Chantay. Su hija comparte su dormitorio y su hijo tiene una habitación pequeña.

Conocieron Hábitat para la Humanidad a través de una búsqueda en Internet hace unos años. También hablaron con voluntarios que estaban construyendo casas cerca de la zona de Westwood, en Denver. Presentaron varias solicitudes al programa y fueron aceptados este año después de mejorar su crédito.

"Volvemos a estar bien", dice Brandon. Brandon conduce un camión de reparto y Chantay conduce para Uber y reparte comida.

"Cada vez que vamos a trabajar en nuestra casa, aprendemos algo nuevo. Aprendí a colocar paneles de yeso".

Su nueva casa de cuatro dormitorios significa que, por primera vez, cada uno de sus hijos tendrá su propia habitación.

"Nunca habíamos vivido juntos como una familia en algo más grande que un dormitorio", dice Chantay. "Es muy emocionante".

Brandon está deseando construir una valla de protección. También espera con impaciencia los nuevos amigos y la nueva escuela que tendrán sus hijos.

"Seré propietario de primera generación", dice Brandon. "Cuando nos mudemos, todo cambiará radicalmente. Seremos más felices. Nuestro hijo será más feliz. Nuestra hija será más feliz. Nuestro hijo ya está preguntando por una sala de juegos".

"Por fin vamos a pagar todos los meses por algo que a la larga va a significar algo", dice Chantay.

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