Conozca a la futura propietaria: Stephanie

Stephanie y su hijo de 10 años se han mudado 12 veces en la última década. Están listos para finalmente desempacar sus cajas y encontrar su santuario donde puedan sentirse como en casa. Stephanie está encantada de colaborar con Habitat for Humanity este año para comprar su casa para siempre.

"Será un soplo de aire fresco poder tener nuestro propio espacio", comparte Stephanie. "Y va a significarlo todo para mi hijo".

Stephanie nació y creció en Denver y le encanta vivir en una comunidad donde tiene una amplia red de apoyo de familiares y amigos. Stephanie ya había estudiado la posibilidad de comprar una casa para ella y su hijo, pero se encontró con demasiados obstáculos. El mayor obstáculo era encontrar una casa que fuera asequible en el caro mercado inmobiliario de Denver. Stephanie trabaja a tiempo completo en una tienda de marcos, pero los precios de la vivienda en los últimos años se han vuelto cada vez más inalcanzables. Stephanie casi había renunciado a convertirse en propietaria antes de conocer el programa de Hábitat.

La situación de Stephanie tocó fondo el año pasado, durante lo que ella calificó de "verano duro", cuando ella y su hijo presenciaron borrachos, disparos, cristales rotos y mucha actividad policial justo delante de la puerta de su casa.

"No nos sentimos seguros allí", dice Stephanie. "Necesitamos un lugar más estable y permanente".

Stephanie está deseando que su vida sea más sencilla y menos estresante cuando se convierta en propietaria de una vivienda de Habitat. Está deseando que lleguen los días en los que pueda empezar a planear actividades divertidas como acampar y practicar paddleboarding y ya no tenga que preocuparse por encontrar un lugar mejor para vivir.

"Será muy agradable deshacer las maletas y centrarnos en otras cosas que no sean sobrevivir", dice. "Nos cambiará la vida".

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